9/21/2015

Nuevos sonidos de primavera

Otra estación se presenta, y una nueva ola de sonidos invade mis oídos. Mi celular rebalsa de este nuevo sonido para mi, pero viejo para el mundo.

¿Acaso realizar este tipo de revival no es, en algún punto, descubrir algo nuevo? Al menos desde mi perspectiva. Y casi todo parecería darse de manera ordenada.
Mi pequeña historia comienza con un fuerte fanatismo hacia la música electrónica contemporánea. Empecé por el final y viví al revés, y ahora en el lugar que me encuentro, me siento maravillado. 
Emprendí un viaje en retrospectiva a través de los sonidos, llegando hacia los '90, lo que hoy llamamos la vieja escuela. Casi que es imperceptible la diferencia entre las últimas dos décadas. 
Cuando atravesé hacia los '80, encontré un sin fin de revoluciones que quedaron en el aire, desde la cultura madchester/rave, el new beat de Bélgica o el No Wave de New York, me resultaron simplemente fantásticos. No podía creerlo. Mucho menos cuando me sumergí (y aún no salí) del movimiento punk/post punk de fines de los '70. Descubrí que el punto de inflexión más grande en la música fue este. El punk fue lo mejor que le pudo pasar a la música, cuando de lo que menos se trataba era de la misma. Lineas de bajo pertenecientes al reggae/dub y riffs frenéticos de guitarra tipo garage de los '60, partieron al mundo en 2. También descubrí que en paralelo había existido la revolución funk y disco, que ya a fines de los '70 se había unificado con el post punk, generando la new wave.
Noté como casi todo estaba encadenado, como si la música fuese una sola, y lo es. Aprendí que la música es evolución y creer que todo está ya inventado sería faltarle el respeto a todas las generaciones que creyeron lo mismo y cuando menos lo esperaron, habían cambiado el mundo. 
Actualmente el modernismo excesivo y la cultura pop nos dejó en un lugar muy vago y difícil, nosotros como artistas nos vemos en el momento más crítico para la música. Dependemos pura y exclusivamente de la tecnología para desplazar la música electrónica que hoy estamos construyendo.
Se aproxima una ola de jóvenes artistas revolucionarios que tienen como función llevarnos a un lugar que será nuevo y muy criticado, porque no vamos a estar preparados. Nunca en la historia de la música el mundo estuvo preparado para todos estos movimientos revolucionarios. 

Entonces decidí seguir mirando hacia atrás, no quería involucrarme en los '60 con la era psicodélica, que fue impulsada por el LSD, así como el MDMA llevó a este nivel la música electrónica. Las drogas nos hacen evolucionar, pero jamás podríamos verlo de una manera sana. 

Y por ahora, el final de mi viaje retro, termina con la llegada de la primavera 2015, habiendo encontrado en los últimos meses un sin fin de northern soul. Estudié un poco este movimiento, y fue sin dudas el primero en generar la cultura rave. La búsqueda constante de los djs para encontrar material poco conocido. La competencia por el sonido más difícil (¿te suena, beatport?). New York contenía en ese entonces miles de singles de esta música maravillosa, y en Europa se generó una explosión impresionante. Por primera vez los noticieros hablaban de una cultura de jovenes que consumían drogas (principalmente anfetaminas) para bailar sin parar al groove de lo que es el northern soul, un cóctel de sonidos elegantes, desde el jazz, al ska, el rhythm & blues, y el jazz. Ahí comenzó todo: bailar solo, consumiendo sustancias que nos den una energía que a través de desaforados pasos de baile atléticos (que después serían conocidos como break dance). Ahí fue cuando se comprendió que la mejor manera de mostrar el alma de uno, era bailando.

Entonces, sin más. Recibo a esta estación, con esta playlist:

01) Max Berlin - Elle Et Moi
02) Perry & The Harmonics - Do The Monkey With James
03) Mel Torme - Comin' Home Baby
04) Frankie Valli - The Night
05) Al Wilson - The Snake
06) The Casualeers - Dance, Dance, Dance
07) The Promatics - Sugar Pie Honey
08) The Mylestones - The Joker
09) The Sherry's - Put Your Arms Around Me 



A seguir mirando para atrás, cuanto más comprendamos cómo llegamos acá, más fácil nos resultará salir de esta cultura pop que todo lo ha arruinado.


ROCKSTEADY, BIG BAND ERA, RHYTHM & BLUES, SWING, JAZZ, DOO WOP

TE AMOH

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